viernes, 18 de mayo de 2012

LA TRANSPARENCIA, LA BUENA GESTIÓN Y USTEDES QUE SE LO CREEN.


Queridos lectores, ciudadanos en general de este Guriezo nuestro, del que algunos llevan treinta y tantos años desposeyéndonos, son unas almas cándidas. Por eso me caen tan bien, también. Por eso y por muchas otras cosas. Por ejemplo, porque ustedes se lo creen todo. Lo que les dicen los hunos, los hotros y hasta lo que yo les digo, que son ganas de creer.

Si nuestro Ayuntamiento fuera tan transparente como nos dicen que son, sabríamos tantas cosas que no lo resistiríamos. Estaríamos todo el día sufriendo de gozo en un pozo de sabidurencia tal… y cual. De cualquier forma yo digo lo del aldeano: Desir, desir, no; haser, haser. Y de haser se trata, oiga.

Pues bien. Si nuestro Ayuntamiento hablara menos y dijera más, harían algo positivo. Nos habrían contado, por la transparencia, que acaban de recibir 17.464,59 € de subvención para “la implantación de sistemas de autocontrol en los mercados de ganado, la mejora de centros y recintos para la celebración de certámenes ganaderos y centros de recogida de animales de compañía abandonados con la finalidad de dar cumplimiento a las obligaciones existentes en materia de higiene y bienestar animal”. Pero sobre todo nos hubieran dicho antes de cobrar la subvención qué proyecto habían presentado. Esto es, qué van a hacer o han hecho al respecto. ¿Qué recintos han mejorado para la celebración de la feria ganadera? ¿Han creado acaso un centro de recogida de animales de compañía en estado de abandono? ¿Han hecho ambas cosas a la vez? Mucho me temo que no han hecho nada de nada y ahora se encuentran que tendrán que hacer algo.

Si el proyecto lo hubieran hecho, de verdad de la buena, lo hubieran aprobado cuando menos por un Decreto de Alcaldía o en la Junta de Gobierno Local. Esos órganos de gobierno de nuestro Ayuntamiento que jamás se hacen públicos y que, de vez en cuando, tienen la osadía de comunicarlo al Pleno. Esa es la transparencia que preconizan. Esa es la buena gestión de la que presumen, haciendo bueno el dicho de dime de qué presumes y te diré de qué careces. Pues eso, una gestión nefasta y una transparencia opaca.

Porque hay más. Siempre hay más, con estos chiquilicuatro de la política. Como los programas electorales sirven y se hacen para nada, para engatusarles a ustedes, pues resulta que se han perdido tres subvenciones más.

La primera para: “convocadas mediante la citada Orden DES/60/2010, de 16 de noviembre, tienen por objeto la conservación y mejora de los recursos genéticos, especialmente los autóctonos, contribuyendo a estimular el espíritu competitivo de los ganaderos expositores”. Con lo que hemos perdido la posibilidad de tener, para ese fin, entre unos 6.600 – 14.240 euros más.

La segunda, dijo Kincho Barrilete y aquí está. Estas subvenciones, por valor de unos 50 mil eurazos, iba destinada a “financiar proyectos por municipio, consistentes tanto en la ejecución material de obras, como en la realización de estudios, planes y proyectos que contribuyan de forma duradera al desarrollo sostenible de los municipios incluidos en el Programa Piloto para la aplicación en Cantabria de la Ley 45/2007, de 13 de diciembre, de Desarrollo Sostenible del Medio Rural”. Y aquí sí. Tenemos que ponernos serios, muy serios. Porque en su programa electoral nos contaron la milonga del empleo, los servicios y la ganadería. Cosas que entraban dentro de esos posibles programas para el desarrollo sostenible de nuestro medio, tan rural él. Nada. No presentaron nada, porque nada tenían preparado y hemos perdido una buena ocasión de hacernos con una buena parte de la financiación de proyectos que nos vendrían muy bien.

A esto es a lo que llaman buena gestión nuestros jerifaltillos del tres al cuarto. Y transparencia, no lo olviden.

La tercera, en el plexo solar, para que se queden ustedes sin respiración. Subvenciones para “financiar inversiones colectivas en terrenos comunales por parte de las Entidades locales de la Comunidad Autónoma de Cantabria”. En torno alos 9 mil euros hemos perdido, con ellos y otros tantos, podíamos haber recuperado alguna hectárea de pastizal.

Yo, cada día, me encabrono más. Si ustedes no lo hacen será porque les va bien así… No lo creo. Estoy esperando que se animen a su cacerolada.

Un saludo y corred la voz.

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