Me comprometía en días pasados en
el face de Guriezo News, con el
concejal de PRC D. Antonio Martínez, a escribir un artículo, ¿otro más?, sobre
el cacareado asunto del polideportivo. La verdad, se me pasaron las ganas por
manido. Pero claro, un compromiso lo es hasta que lo cumples. Insisto en lo de
las ganas que se pasan, también porque sigo viendo que, a pesar de los pesares,
a pesar de las pruebas, cada quien se sostiene en la única baldosa que le
aguanta y si quitas ésta, adiós, un mar de dudas.
Para no repetirme en exceso les
indicaré los enlaces en los que hablo del polideportivo y donde doy los datos:
presupuestarios del propio ayuntamiento, fácilmente comprobables; publicaciones
oficiales al respecto en los correspondientes Boletines Oficiales de Cantabria,
enlaces incluidos.
Poco más tengo que decir al
respecto sin caer en la repetición.
Al final, lo importante es que el
polideportivo teníase que haber construido entre los años 2013 y 2015, de forma
que no se perdían los euros de la subvención. Pero ocurrió que el Sr. Llano,
que se encargó de todo, lo dejó todo patas arriba.
De nada sirve decir que el PRC
dejó el ayuntamiento, las responsabilidades de gobierno, en septiembre de 2014.
Para esa fecha tenía que haber estado el polideportivo prácticamente acabado y
no se había puesto ni la primera piedra. A partir de esa fecha por parte del
Sr. Llano, no sé si del PRC también, lo único que hemos visto han sido zancadillas
y mentiras.
Con los datos en la mano, el Sr.
Concejal Antonio Martínez, puede comprobar que los datos son ciertos. Puede
corroborar que esos datos son ciertos en los documentos oficiales que se le
citan. Puede preguntar a los redactores del proyecto dónde y quién ha generado
las demoras. Puede preguntarle también a los Sr. Alcaldes del momento pasado y
presente y a la consejería del ramo. Y verá que no le miento ni pretendo
engañarle, ni a él ni al resto de los vecinos. Cuando saque sus propias
conclusiones, es probable se percate de que, si primero le mentía uno de los
suyos, ahora le miente el otro. Descabalgando al primero, por el segundo, y
creyendo a pies juntillas lo increíble sin ir a comprobarlo, el PRC no ha
solucionado nada. Dando un giro de 360 grados el PRC se encuentra en el mismo
lugar, dirigido por otro líder, eso sí. Y como en “El Gatopardo” de Giuseppe
Tomasi di Lampedusa han cambiado todo para que nada cambie.
