Desde que la A.VV. de Guriezo llevó a cabo las dos asambleas de vecinos por el agua, allá por los finales de 2009, los chicos de ASCAN, SA., se habían puesto formales sin amenazar ni cortar el agua. Los motivos no eran otros que la presión popular que recibieron en aquellas fechas y la poca proximidad del anterior equipo de gobierno.
Una vez finalizada la anterior etapa legislativa, con la reducción de la tarifa que veremos en el próximo recibo (¿o no?) y los nuevos mandakaris subidos a las poltronas; nuestros malvados chicos ascaneros han vuelto a las andadas y han reanudado sus malas costumbres amenazadoras. Como a mí, el pasado día 3, os estarán llegando a algunos tan, ¡uy qué miedo!, temidas cartas.
La intención es clara por parte de ASCAN, SA., que ustedes paguen y así ellos se evitan de realizar las gestiones que las normas les obligan, que a saber son:
1º. - Hacerles entrega del contrato de alta en el servicio de aguas.
2º. - Facturar por consumos reales, como mandan las leyes estatales de protección de los consumidores y usuarios.
3º. - Devolverles lo que les han venido cobrando de más, esto es:
a). - Casi un año de más, desde que ustedes solicitaron el alta en el servicio. Puesto que les facuran con tres trimestres de retraso y ustedes han pagado desde el primer trimestre y no a tres tres trimestres vencidos.
b). - Los 2 céntimos de euro/m³ de más en agua potable y el céntimo de euro/m³ de más en alcantarillado.
Por lo visto ahora se sienten más seguros. La nueva Corporation les va mejor a sus intereses, no en vano fue quien se los trajo. Y en esas andan.
Yo por mi parte y en nombre de la A. VV de Guriezo he realizado el correpondiente recurso al Ayuntamiento. Vermos qué dan de sí nuestros prebostes, mandakaris.
Nos preguntamos si desde el Ayuntamiento, el nuevo equipo de desgobierno, está que arde por cumplir con su programa electoral y ya han encargado o "realizado el estudio para rebajar el mínimo establecido [por ellos mismos] en la factura del agua y pasar a facturación real". Les recordaremos que lo prometido es deuda y no nos gustaría que se quedara en agua, nunca mejor dicho, de borrajas como la renovación de los consorcios. Lo que vendría a significar que los consorciantes siguen cobrando y nosotros seguiríamos pagando, lo mismo.
Puede que haya llegado el momento de reunirnos de nuevo en asamblea y retomar las riendas de la situación.
La Casta no cejará (pero ¿les conviene?), yo tampoco.
Un saludo y corred la voz.
