La gestión urbanística.
Vivienda y
población.
Entre 1991 y 2001 se construyeron en Guriezo 369
viviendas. En 2001 teníamos 639 viviendas ocupadas, convencionales; 291 eran
segundas viviendas; 252 se encontraban vacías y 2 viviendas eran de difícil
catalogación. Hacían por tanto un total de 1.184 viviendas. En 2007 teníamos 1.332
viviendas, habíamos incrementado el parque inmobiliario en 148 unidades
habitativas. En un siglo (1900
a 2001), como curiosidad se lo digo, pasamos de tener 494
viviendas a 1.184, 690 viviendas más.
Curiosamente, en 1900 había en Guriezo 2.329 habitantes,
frente a los 1.765 en 2001. Ya ven ustedes, sin esfuerzo alguno, que hay algo
que no va. Hasta 2009, con 2.303 habitantes no nos aproximábamos al censo de
1900; pero ya se habían construido otras 148 viviendas como dijimos antes. Para
que vean el disparate, teníamos 838 viviendas más en 2007 para alojar a 26
habitantes menos. En la actualidad, a diciembre de 2011, tenemos 1574 viviendas
(1080 más) que alojan a 2.435 habitantes (106 más). Perdonen si insisto, pero
hay algo que no va.
Plan General de
Ordenación Urbana.
Como ustedes bien saben en 2006 se inició la redacción del
PGOU. La cosa es que este plan ni es plan ni es nada. Está más parado que la
marquesina que nos pondrán en la parada bus. Está tieso, cuasi difunto. Pero aún
vive.
Y vive dios, que estos melífluos dirigentes, o indigentes,
políticos pretenden a pesar de los bancos, aumentar los espacios constructivos.
Van cargados de regalos en forma de terreno urbano. Esa es la idea, mayor
consumo del territorio. Pero no solo eso, pretenden además que se pueda
construir en rústico a cualquier precio. Recuerden los encantos electorales del
catálogo de construcciones en rústica que tanto nos pasearon ¿lo habrán hecho
ya?, lo dudo.
La cosa es que aumentar la cantidad de superficie urbana
tiene muy poco sentido. Hay viviendas sobradas, pues hay mucha segunda vivienda
y otras tantas o más vacías.
Pero hay más. Hay todavía muchas parcelas urbanas sin
construir, de las Normas subsidiarias, que aconsejan que no se aumente la
superficie urbana en el PGOU. Y esto es así, por sentido común. Quedan todavía
por consumir, suelo vacante, la friolera de 196 parcelas sin edificar; con un
espacio que ronda las 39,08
hectáreas, el 34,36% de la superficie urbana. ¿Qué
necesidad hay de aumentar el suelo urbano? Evidentemente, ninguna.
Los pesebrerospoltroneros no cejarán (pero ¿desconviene?),
yo tampoco.
Un saludo y corred la voz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario