En su programa electoral, el PRC, no llevaba la reducción de las ayudas para libros. Todo lo contrario. Decían: “Mantener las subvenciones de los libros escolares…”. Esto no es mantenerlas. Esto es reducirlas a la mitad.
No se han pasado cien días y ya van dos incumplimientos de su programa electoral, por el que ustedes le dieron su voto. El primero era que: “Ayudar a las Asociaciones para actividades de interés general”, bonito compromiso que se han cargado obligando a las asociaciones a abandonar los locales que les concedieron en la legislatura anterior. Si esa era la “ayuda” prevista, mejor que no ayude a nadie. El Segundo, como ya hemos visto era “mantener” las subvenciones y de momento las deja en la mitad de lo que venían siendo.
Solo llevan 80 días, como Guillermo Fog, para dar la vuelta, a lo poco bueno que teníamos. No se apuren, todavía les quedan 20 días para llegar a los 100 y qué se apuestan que hacen otro recorte.
El pasado 26 de agosto nuestro insigne Alcalde volvió a las andadas con las subvenciones. Las subvenciones públicas, en las Entidades Locales, se realizan mediante el Reglamento de Subvenciones y el correspondiente Decreto bien del Alcalde, bien del/la Concejal Delegado/a.
El anuncio, además, de la subvención en cuestión ha de ser publicado mediante el correspondiente anuncio en el BOC obligatoriamente, cosa que está por hacerse; y si además, se quiere, se pronuncia mediante el anuncio que hemos visto colgado en los lugares habituales.
Las subvenciones de las que hablamos, como bien sabéis, son las ayudas (que no son subvenciones) para la compra de libros de texto en educación infantil, primaria y ESO. Pues eso. Que no son lo mismo ayudas que subvenciones.
Ustedes me dirán que lo importante es que les den la pasta para compensar la compra de los libros de los chiquillos y que me deje de zarandajas de si son ayudas o subvenciones. Se equivocan, los que así piensen. Porque como decía Mansilla en la película Air Bag, “el concetto es el concetto”. Y a las cosas hay que llamarlas por su nombre. Y no es lo mismo ayuda que subvención como no es lo mismo prórroga que renovación.
Se lo digo de otra manera. Mientras una subvención no puede alcanzar más del 50% del coste de lo subvencionado, la ayuda puede alcanzar el 100%; que debiera, en todo caso, medirse conforme a la capacidad adquisitiva del sujeto que recibe la ayuda. Por lo que no es lo mismo que te rembolsen lo gastado a que te den solo la mitad. ¿o sí? Ven como “el concetto es el concetto” y es importante que siga siéndolo…
Por tanto pasemos de subvenciones y centrémonos en las ayudas a la compra de libros de texto.
ATENTAR CONTRA LA LIBERTAD DE MERCADO. Y LA LIBERTAD PERSONAL DE ELEGIR.
En años anteriores, en la anterior legislatura, usted podía comprar los libros donde mejor le viniera en gana. Donde más barato le costara y por tanto, usted a su vez, hacía que el gasto del Ayuntamiento, de todos los vecinos, fuera menor para esta ayuda.
Independientemente de que usted pensara o no en el gasto público, es seguro que usted pensaba en su gasto personal y buscaba lo más económico, la librería que a su elección se lo daba a un precio que a usted le parecía justo o no. Pero era su libre elección, dentro de la libertad de mercado.
Esto, a partir de ahora ya no será así. Usted no será libre de comprar donde le venga en gana. Su libertad de elección ya la ha ejercido, por usted, nuestro Sr. Alcalde. Como nuestro mandakari es así de benévolo, este año y solo este año, debido a que se le ha echado el tiempo encima, le permite que compre fuera del lugar por él ordenado; pero solo como excepción, no vaya a pensar usted que le votó gratis. Aquí empieza el coste de haberle votado. Su libertad individualísima de comprar donde mejor le plazca, se acabó. Así entiende el caballerete la Libertad y la Democracia. Le han votado y ahora es él quien decide, durante los próximos cuatro años. Pero no decide sobre las cosas públicas, sino que decide por usted hasta dónde puede y no puede comprar los libros de texto de sus hijos. ¿Hay que joderse! Pues jódanse.
Pero hay más.
LA REDUCCIÓN DE LA AYUDA
Resulta que en la legislatura anterior les rembolsaban el 100% de lo gastado en los libros. Independientemente de si recibía ayuda o subvención o no del Gobierno de Cantabria. Si usted gastaba, pongamos por caso 270 euros, recibía de Gobierno de Cantabria 120 euros y del Ayuntamiento, descontado lo anterior, recibía el 100%. El resultado era que las ayudas ascendían a cuando menos 150 euros, compensándole entre ambas administraciones el 100 % de los gastos. Si no recibía la ayuda del Gobierno cántabro le compensaban el 100% del gasto; esto es, 270 euros.
Con el sistema actual, si no recibe ayuda del Gobierno de Cantabria, usted rembolsa el 50% del gasto; 135 euros. En cambio, si recibe la ayuda del gobierno, gastando los mismos 270 euros, le descuentan los 120 euros del ejemplo anterior, quedando 150 euros, de los que le rembolsarán solamente 75 euros. Por lo que le han rembolsado el 72,22 % del gasto total, mientras antes le rembolsaban el 100 %. La diferencia es que le han rebajado las ayudas en un 27,78 % entre ambas administraciones. Pero en las ayudas municipales la reducción es mucho mayor, el 50 % si no recibes ayudas del gobierno.
O lo que es lo mismo, cuanto peor estás menos te doy. Si no recibes la ayuda del gobierno te doy solo la mitad de lo gastado; si recibes la subvención del gobierno la reducción solo te supone el 27,78 %. A eso se le llama justicia social.
LA PRÓRROGA DEL PRESUPUESTO 2010
Lo que ustedes, en su mayoría, no saben, es que los presupuestos de 2010 están prorrogados. ¿Qué supone esto? Supone que el Ayuntamiento no ha hecho ni hará los presupuestos de 2011. Por lo que las mismas cantidades que tenía presupuestadas para ayudas y subvenciones en 2010, es la misma para 2011. O lo que es lo mismo: Si tienen la misma cantidad, ¿cuál es el problema existente que les obliga a reducir las ayudas para libros de texto?
La cantidad que tienen presupuestada para libros de texto es de 70.000 euros. La misma cantidad que en 2010. Cantidad que se pueden gastar, porque la tienen. Qué razones tienen para demediar la cantidad. Qué motivos hay para no gastar, como se debe, lo presupuestado. Qué piensan hacer con los 35.000 euros que no se gastarán en la ayuda para libros escolares. Cuando piensan plantear la modificación de ese crédito y a qué van a dedicar esos dineros.
La Casta no cejará (pero ¿les conviene?), yo tampoco.
Un saludo y corred la voz.
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