Dice La voz popular, no la del PP, que la risa va por barrios. Pues bien. Guriezo es un pueblo de mucha risa, de barrio en barrio. Por eso mismo, hagamos un alarde de planteamiento nuevo. De nueva política. Casi, diría, de política ficción.
Una de las competencias de los alcaldes, no les aburriré con la normativa, es nombrar a los alcaldes de barrio. Éstos, en teoría, se dedicarían a llevar al Ayuntamiento las necesidades y quejas de los vecinos de su barrio. Pero todos sabemos que de la teoría a la realidad va un “avismo” y ese abismo, al día de hoy es brutal. Los Alcaldes de barrio, en ocasiones, no se sabe quienes son y mucho menos se sabe lo que hacen. Los nombra un alcalde y los desnombra el siguiente.
El resultado es que casi nadie sabe qué pintan unos alcaldes de barrio. Generalmente, ni los propios alcaldes de barrio saben qué es lo que pintan. O si lo prefieren, sin afán de ofender, pintan la mona.
De los veintitantos barrios que tiene Guriezo yo solo conozco a uno. Y ese uno, en cada Pleno, se queja siempre de lo mismo y tiene razón. Se queja del agua, del servicio de aguas. Nadie le hace caso, porque se enfada demasiado. Del resto no los he visto nunca ir a un Pleno y plantear cualquier chuminada.
Como están las elecciones cerca, no estaría de más que viéramos propuestas serias para las funciones que los alcaldes de barrio tengan de verdad alguna competencia y sirvan para algo más que para ser nombrados y cesados.
Por mi parte ahí va una.
En primer lugar, el Alcalde debiera ceder la elección de los alcaldes de barrio a los vecinos. En Asamblea de Vecinos, en cada barrio, eligen a su Alcalde y lo presentan al Ayuntamiento. El Alcalde de Guriezo, nombra al alcalde del barrio que los vecinos hayan elegido.
Cada dos o tres meses, el Alcalde de barrio, convoca Asamblea de vecinos y éstos plantean los problemas y necesidades. A su vez el Alcalde da cuentas de cómo van los asuntos que llevó al Ayuntamiento la vez anterior.
El Alcalde de barrio puntualmente, bien por sí mismo bien porque se lo comunique algún vecino, comunica al Ayuntamiento los desperfectos o mal funcionamiento de los servicios.
La sede de la Alcaldía de Barrio estará en los centros multiusos de cada barrio, evitando así que tenga que recibir a los vecinos en su propia casa. Cada alcalde de barrio se impondrá un horario de atención al público en los días que él mismo determine. El ayuntamiento, a su vez, le dotará de los medios necesarios para poder cumplir sus funciones.
Cualquier grupo político o agrupación electoral que quiera hacer uso de la idea, no tiene más que planteárselo en serio. Si necesitan más datos o colaboración, el autor está dispuesto siempre a prestarla. Si alguien quiere llevarla a cabo, no tiene más que citar, por decencia intelectual, quien ha sido el autor de la propuesta.
La Casta no cejará (pero ¿les conviene?), yo tampoco.
Un saludo y corred la voz.
2 comentarios:
Generalmente, forman parte del entradamado que ayuda a mantener al Padrino al mando del clan, no obstante, todo es mejorable y por supuesto hay que intentarlo.
saludos
Mil gracias, por tu comentario. Como habrás visto, siempre finalizo los artículos con que la Casta no cejará; y por supuesto, yo tampoco.
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