Nuestros gestores municipales,
esas/os políticas/os que, se empeñan en presentarse a la gestión de lo público
y se empecinan en derivar el negocio a los privados; parten de la idea errónea
de que lo privado gestiona mejor que lo público y lo hace rentable.
El error viene
por partida doble. Por un lado se empeñan en demostrar que lo privado gestiona
mejor que lo público, derivando la gestión a lo privado. Evitando así tener que
gestionarlo ellos mismos desde lo público. Yo les recomiendo que se presenten a
las elecciones de los consejos de administración de empresas privadas. ¡Ah, que
no, a eso no votan los empadronados en el municipio donde tienen sus sedes
sociales! Me dirán ustedes y es verdad. Sin embargo se presentan a lo público y
rehúyen su responsabilidad de gestión pública.
Alegan en su
defensa que no es viable, porque son muchos los gastos del personal a
contratar. Pero para decir tamaña barbaridad no han hecho el mínimo cálculo
aritmético. Algunos incluso les prometieron “la gestión propia”, hablamos solo
del polideportivo, conste; pero a la hora de presupuestar redujeron el
presupuesto a la mitad (de 100.000,00 € a 50.000,00 €) con el contenido de “contratación
para gestión integral del polideportivo”, traicionando su promesa
electoral, traicionándoles a todos ustedes.
Sabemos que
con esos recursos destinados a la gestión del polideportivo no hay nadie que se
lo quiera gestionar. Tanto es así que ni siquiera se atreven a sacar la
licitación.
Por otro lado,
ellos no lo dicen, pero se lo digo yo, para sacar rendimiento económico al
polideportivo o se apuesta por precios inasequibles, asegurando el fracaso, o
por sueldos de miseria para los trabajadores y menos trabajadores de los
necesarios. Con lo que el servicio será una mierda con usuarios y trabajadores
quemados. Esto es lo que nuestros políticos denominan buena gestión y
rentabilidad.
No son capaces
de entender, encandilados por los cantos de sirena del neoliberalismo, que los
gastos de personal no son gastos, sino la única inversión real que hace posible
el servicio. Y a las pruebas nos remitimos. Cuando nos confinaron a casi todos
los trabajadores en casa, las empresas privadas empezaron a pedir sopitas, pues
la producción y los servicios, sin trabajadores, se iban, y se han ido muchos,
al garete. Puedes ser el mejor empresario, el mejor preparador físico, pero sin
el trabajador y los usuarios, con todo el pastizal económico que quieras, te
vas a tomar por el túnel de la mierda.
Otro ejemplo,
muy bueno en estos días y ya casi olvidado, con y sin aplausos, fue el
tratamiento de la Covid; que ustedes insensatos míos ya han olvidado. Cuantos
seguros de salud, hospitales privatizados y mutualidades trataron a los
perjudicados… No nos lo han dicho. Pero sí nos dijeron que lo público estaba
saturado y se iba al carajo. Los motivos se vieron con la misma claridad que la
debacle que se nos venía encima. Los recortes en medios y en personal que se
hizo desde lo público para contentar a los hacedores de la crisis de 2008.
Ustedes se
preguntarán ¿qué solución le damos al polideportivo? Más si cabe ahora, con los
aforos limitados y mirando a Santoña, más que los limitarán. Pues que hagan los
números que no quisieron hacer antes de empezar a construir el mamotreto.
Pero como no
los quieren hacer, se los vamos a hacer entre ustedes y yo. Pasito a pasito,
abriéndoles los ojos, como en la peli aquella, pero sin sexo. No se trata de
joder. Que no van a apreciar esta nuestra colaboración, ya lo sabemos. Están
tan llenos de si mismos que no les cabe un gramo de empatía que transpirar.
LOS GASTOS
DE FUNCIONAMIENTO
Poner en
funcionamiento el polideportivo nos puede llevar unos gastos generales u
ordinarios: energía, material fungible, mantenimiento, etc. Cercano a los
20.000,00 € anuales. Está un poco inflado paro así va mejor.
EL PERSONAL
NECESARIO
Voy a tirar de largo, porque si no el servicio no saldrá deficitario que es lo que pretendemos demostrar y solucionar.
Fíjense que
hemos puesto un 35% de costes sociales. Los sueldos los hemos adaptado a las
diferentes categorías que existen en el Convenio del Personal Laboral en vigor
Ejercicio de 2020.
Los gastos
totales del servicio serán de 188.455,40 €
INGRESOS PREVISIBLES
Estos datos
que les voy a dar son el ejercicio de un posible plan de negocio de un vecino
nuestro. Modificados por mí a la baja, intencionalmente.
Pongamos 100 abonados al GYM, a razón de 30,00€ el abono mensual, nos da unos ingresos
anuales de 36 mil euros anuales.
El precio de
la hora de pista polideportiva a razón de 20,00 €. Con un uso diario de 1 sola
hora, son 30 horas al mes, 460 horas al año; o séase, 7.200, 00 € anuales.
La pista de
pádel a razón de 12,00 € la hora, con 5 horas diarias de media; un equivalente
a 21.600,00 €.
Los ingresos previsibles serán, por tanto, de:
Haciendo la diferencia en
números, nos encontramos que este proyecto parte con un déficit estructural muy
alto, de nada menos que 123.655,40 €,
algo así como el 65,62%.
Lo que nos
piden las normas económicas y legales es que los servicios han de realizarse
sin déficit estructural. Esto es, que esos 123 mil largos euros, debieran ser
cubiertos por el propio servicio. De estos 123 mil largos euros, ya tenemos
cubiertos una buena parte con los 50 mil que tenemos presupuestados para su
gestión y los cerca de 10 mil que tenemos para gastos generales. Estamos
hablando que, sin funcionar, ya tenemos un déficit estructural de 60 mil euros.
El déficit
estructural, funcionando, sería solamente de 63.655,40 €, el 33,78%; que
así y todo es alto realmente.
La solución a
ese déficit no es otra que la que se viene aplicando a los servicios, también
deficitarios, de Aula Matinal, Ludoteca, la basura (en 2018 el gasto fue de 234.628,15 €, mientras los vecinos en realidad pagamos al ayuntamiento a través de Inimawater: 108.784,14 €; el 46,36%) y otros. Esto es, el déficit
lo cubre el propio ayuntamiento mediante otros ingresos. Pero para dar esta
solución, tiene que haber, y manifestarse, la voluntad política. Voluntad
política que, como hemos visto, se queda a mitad de camino:
Nuestro
ayuntamiento, por su categoría, no tiene competencias deportivas. Pero asume,
para la construcción del polideportivo, dichas competencias en aras de un
interés social y preferente. Esta es la mitad primera, donde se han parado.
Ahora falta
que se rindan a la evidencia de entender que si quieren un buen servicio de
GYM, pádel y deportes de sala varios, al ayuntamiento le puede llegar a costar 188.455,40
€, pagando unos sueldos bastante decentes, aunque poco para mi gusto y
cobrando unos precios asequibles al gran público. Con ello tendríamos un
servicio decente y honesto, generando empleo de calidad; y tendríamos que
disponer de una bolsa de sustituciones, para imprevistos.
La realidad
es que cualquier empresa privada que quiera gestionar este nuestro
polideportivo, va a precisar, en su interés, más de 210 mil euros; para poder
obtener un mínimo beneficio del 10,26 %, además del recorte de personal y
sueldos, que aumentarán el beneficio.
Otra cosa que
no les dicen nuestros munícipes, y debieran, es que a la hora de hacer los
contratos de gestión de servicios, siempre hay una cláusula de protección de
los beneficios empresariales. Esto es, si estos datos que yo les doy no se
cumplieran y los beneficios cayeran por debajo de ese 10,26% el ayuntamiento
respondería hasta cubrir el montante de esos beneficios previstos. O si lo
prefieren, si hay beneficios van a parar a manos privadas; si no hay beneficio,
entre todos ponemos la pasta para que esos beneficios se los lleven esas manos
privadas. Como pueden ver, así, es evidente que gestiona mejor una empresa
privada, pues siempre saca beneficio de tres partes: del ayuntamiento que cubre
el riesgo empresarial; del ciudadano usuario que paga religiosamente y del
trabajador, del que se lleva un buen porcentaje de su sueldo además de la
plusvalía de la mano de obra (aunque suene muy marxista esto de la plusvalía).
La voluntad
política que les falta, esa mitad, de sentir como propio el interés general,
velar por ello y ponerse a gestionar de verdad lo que nos prometían electoralmente
hablando, se manifiesta como el movimiento: Andando.
En ese
caminar por lo público, se darán cuenta que el problema no es el gasto, sino el
nivel de ingresos. Tener una verdadera política fiscal. Esos 63 mil largos
euros de déficit estructural se solucionan aumentando los ingresos de los
recursos patrimoniales. Revisando, que llevan 19 años sin hacerlo, el canon de
los montes. Que como les decía días atrás (ver aquí) ya va siendo hora, pues los votos se van
a repartir como siempre, voto arriba voto abajo.
CONCLUSIÓNES
La gestión privada
le va a costar al contribuyente más que la gestión pública, pues siempre hay
que cubrir el beneficio empresarial. Beneficio empresarial que no existe, en
ningún caso, en la gestión pública.
En caso de
déficit empresarial el ayuntamiento, todos nosotros, tendríamos que cubrir ese
déficit y el legítimo beneficio de la empresa gestora.
En caso de
déficit en la gestión pública, se cubre el déficit, ahorrándonos el beneficio
empresarial.
Elegir el
modelo de gestión privada o de gestión pública es una cuestión de voluntad política,
de las políticas públicas sobre economía y fiscalidad (de corte neoliberal o de
corte social). Afecta a las políticas deportivas, sociales y de entretenimiento
de la población. Por lo tanto, en ocasiones venideras, cuando vayan a votar,
fíjense en qué políticas les venden y no en si les venden un polideportivo sin
actividades o con políticas regresivas y de recortes del gasto. Esas políticas
que potencian que alguien gane dinero a costa de su trabajo y de su sueldo.
Afecta también a las políticas del personal empleado público, a sus condiciones
de trabajo y sus sueldos; pero también afecta al empleo privado de precariedad
y bajas retribuciones. Y sobre todo, afecta a aquellas políticas de favorecer a
los que menos tienen, con precios reducidos o gratuitos o, por el contrario, de
favorecer a los que más tienen y explotar a los que necesitan trabajar en lo
que sea; en un intento vintage de crear los modernos esclavos, que no
dejan de ser pobres, aunque trabajen.
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