Así nos las titulaba
el PRC en su Facebook, cuatro días antes del revolcón. De los seis puntos que
citaban, cada uno con su icono más o menos alusivo a la cuestión, el primero ya
era como que no lo habían hecho. La instalación de un punto de carga para
vehículos eléctricos. Los otros cuatro puntos, no dejan de ser ordinaria
administración, todo ello hecho a base de subvenciones. O lo que es lo mismo,
sin iniciativa ni trabajo propios, al ritmo que marcan las distintas
consejerías. Exactamente igual que todas las legislaturas anteriores desde
1979.
El último y
sexto punto, como siempre el de la plañidera. Hay que reconocerles que lo único
de iniciativa propia, que tampoco les costaba gran desembolso económico, fue lo
de cerrar la calle (todavía estamos esperando que le pongan nombre) desde el
consultorio al Nova y, sin embargo, no lo citaron. Haciendo alarde, como
siempre en Guriezo, de olvidar lo que hacen y lo que hicieron. Valgan de
ejemplo la renovación de los consorcios un 23 de diciembre de 2002, que siguen
negando.
Aquí es donde
yo quería llegar. Porque en el pasado Pleno Ordinario de este mes de mayo (pueden
verlo en el Facebook del Ayto.), mes de las flores, pleno que no han colgado en
su Facebook, se vio la cuarta o quinta (he perdido ya la cuenta) Sentencia del
TSJ de Cantabria, que zumbaba una vez más al Gobierno de Cantabria y daba la
razón al Ayuntamiento con la renovación de los consorcios.
No han colgado
el pleno, con la vana intención, por si ustedes solo se informan a través del Facebook
del PRC guriezano, por si ustedes no se enteran que, en forma colateral y en
diferido, la sentencia les zumba una vez más. Y por eso, en vez de colgar el
pleno, les han endilgado una chorrada más sobre la moción de censura y las
posibles, incluso ciertas, desavenencias en el equipo de gobierno; así como el
bonito revolcón de Izaguirre dentro del PP que, en cualquier caso, es un
problema del PP.
Esto es lo que
en román paladino venimos en denominar marcarse un pingüi y excretar
humo. Y es normal excretar cortinas de humo cuando la miríada de plumas que se
ponen en el culo comienzan a arder.
¡Agua que se
quema el río! Ellos no se lo van a decir, pero se lo digo yo. Entre los grandes
proyectos que tenían in mente, no era poner en funcionamiento el
polideportivo, ni poner en práctica y conocimiento el callejero. Del PGOU
tampoco se les vino a las mientes. Ni hablar de las ayudas a la hostelería,
comercio local, familias en riesgo de exclusión social, tampoco.
El gran
proyecto es el Acuerdo Secreto con el Ministerio de Defensa para Instalar una Base
de Submarinos Nucleares Amarillos en el río Agüera, junto a la desembocadura
del Remendón. Lo que obligaba, por falta de espacio, a Instalar una central
nuclear en Cabaña la Sierra, que es la que suministraría la energía eléctrica al
punto de recarga, para coches eléctricos, en El Puente.
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