Llevamos ya 21 días de exposición pública del Avance del Plan General de Ordenación Urbana. Proyecto que lleva ya 15 años dando vueltas. Sería interesante saber cuánto nos lleva, en versión Euros, costando. También sería muy interesante la opinión de los distintos grupos políticos municipales sobre la cuestión y que nos informaran a los ciudadanos si van a presentar alegaciones y/ o modificaciones; todo ello, claro está, sobre las políticas urbanísticas, del territorio, de la vivienda, etc. Que planteaban en sus respectivos programas electorales.
De momento,
todo dios calla.
Otro de los
asuntillos que nos van a afectar en los próximos días, vienen marcados por el “Real
Decreto-ley 14/2021, de 6 de julio, de medidas urgentes para la reducción de la
temporalidad en el empleo público”. Que por lo pronto algún concejal ya ha
soltado la andanada que “el
Gobierno de Cantabria convocará mesas técnicas y de negociación específicas
para aplicar el acuerdo de reducción de la temporalidad en su Administración”
Según los
datos facilitados por el propio gobierno revillista, el índice de temporalidad en
la administración cántabra alcanza el 38,73%. Pues bien, en nuestro
ayuntamiento alcanza la friolera del 86,66%. Ustedes han visto que algún grupo político
municipal haya dicho esta boca es mía. Y no lo han dicho, porque el PRC fue el
generador de tal desaguisado, lo soportaron y continuaron el resto y al final,
los paganos de todo ese desmadre van a ser casi todos los empleados públicos;
sin descontar, claro está, que también nosotros todos los ciudadanos vamos a
cargar y venimos cargando con el problema y la complicada solución que da el RD.
Pero, como el RD es de Sánchez, todos le echaremos la culpa, aunque el pecado
en Guriezo sea del PRC.
Sobre esto
también callan todos los grupos políticos municipales, por la total ausencia de
políticas de organización municipal, de políticas de personal y empleo; pero,
sobre todo, por los constantes incumplimientos de las normas básicas que vienen
perpetrando nuestros electos. Así que no se llamen Andanas y quieran vivir en
jauja, que alguna responsabilidad tendremos también los electores.
Sí, ya sé que
las preposiciones son muy importantes. Pero sin ellas, en esta ocasión, dan más
juego los dos lugares comunes.
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